Sé que me voy a meter en terreno farragoso, pero no sería yo si no lo hiciera, y qué mejor que hacerlo con la primera publicación del 2023… Esto les sonará a los suscriptores de la Newsletter, sobre todo por el revuelo que causó en algunos y por lo que extraigo parte para todos los lectores.
Ahora que la Navidad está llegando a su fin, párate a pensar en las cenas y comidas que has tenido, y no, no voy a promocionar ningún gimnasio, que si no vas durante todo el año no te vas a apuntar dos días ahora. Hablo de recordar cuántos de tus familiares y amigos estaban pegados al móvil, como Góngora a su nariz.
Horas y horas metidos en redes sociales, algunos haciendo esa última publicación del año en la que agradecen todo lo aprendido, otros aprovechan para publicar un recordatorio con todas las fotos de los viajes que han hecho, y otros simplemente reflexionan sobre el qué vendrá este 2023.
Aunque confieso que yo en algún momento he estado en ese último grupo, lo que quiero es que hablemos de las redes sociales, en concreto de una de ellas. Una que, pareciese diferenciarse del resto por tratar de tener “menos postureo”, ser más útil y verse librada de ciertos comportamientos que pueden ser más propios de otras redes sociales.
Abro el melón: ¿Cómo describirías la red social LinkedIn?
Te doy las opciones que se me ocurren a mí:
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- Red profesional de calidad.
- Postureo llevado a la máxima expresión.
- Tinder refinado.
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Para mi trabajo, es una de las redes que más utilizo, y, por suerte o por desgracia, puedo contarte alguna historia de lo que he visto en ella. Empiezo por el final y sin que sirva de precedente, me quedo con las tres definiciones. Te explico por qué.
He conocido a gente con la que he podido hacer negocios: desde inversores particulares que necesitaban un buen broker con el que invertir, pasando por dueños de academias de formación a los que he añadido nuevas vías de ingresos, así como gestores de fondos de terceros que necesitaban un paraguas legal para atraer más inversores.
Por lo que, el tick ✅ a “Red profesional de calidad” se lo pongo.
Ahora, he dado con cada “postureta”… Uséase, persona que quiere hacerse el guay, el pro, el VIP, desde el que se autoproclama “CEO” de su negocio siendo el autónomo de toda la vida, hasta el que te dice que “estaba en una call muy importante” y no te ha podido llamar en todo el día.
¿Sonar ocupado es sonar importante? Lo siento pero no. La persona más importante del mundo es la que puede gestionar su tiempo como quiera. Y si lo que ocurre es que no te quiere llamar porque no le da la gana, lo dice, no se anda con milongas.
Dos de tres: “Postureo llevado a la máxima expresión” cubierto ✅.
Y ahora, el mejor: el “Tinder refinado”, te adelanto que le doy el check ✅. Si estás suscrito a la Newsletter te contaré la historia bien, pero, grosso modo, cuando empecé a trabajar en esto, empecé a conocer a un montón de gente en el día a día: inversores, gestores, academias,…
Así que, un bonito día, para mi jefe y para mí, hice mi primer cliente: Luis. Luis fue el primero en confiar en mí. Qué recuerdos… Al poco tiempo, Luis me encontró en LinkedIn y me agregó. Por supuesto, no podíamos tener relación con los clientes más que la conversación grabada en la oficina y, no lo acepté, lógicamente.
Al tiempo, cuando ya empecé a ser “una CEO de esas guays”, (de los tristes autónomos de toda la vida) vi que me volvió a conectar y me escribió un mensaje: me pedía trabajo. Otro día te cuento qué fue lo que pasó (en la Newsletter, ya sabes), y por qué no hay que acabar como Luis.
Para no extenderme más, confieso que, por todo esto, LinkedIn es una de esas redes que sigo sin entender. No soy de eso que llaman “moderna” ahora, ni lo pretendo. Pero con lo fácil que es ser normal, ¿por qué buscamos ser tan “guays”? Esto mismo pasa cuando te llama un cliente, te cuenta una milonga, y al final te cuenta la verdad. ¿No era más fácil hacerlo desde el principio?
Con esto quiero decirte que Economía Para Adultos no es LinkedIn, así que vamos a hablar sin tapujos ni parafernalia innecesaria: para invertir hace falta tener una buena herramienta de inversión.
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